Poemas de un amigo

Pensando en ti.

Es un recuerdo, una soledad, un sollozo; me da lo mismo.

Yo aquí perdido, donde la niebla sube, como mi amor por ti.

Sube hasta tus labios, como tantas tardes.

Aquí estoy corazón, en un bar mirando tu rostro sonriente y,

lejano.

Sí, aquí soñando; con tus cabellos lisos y llenos de armonía.

Yo con mis manos llenas de flores de mil colores, para depositarlas;

al viento y que lleguen a ti, con un soplo de mi corazón.

Con todo mi amor.

Por. Ángel Fernández.

Escribo para oírme.

Donde todo se ahonda, cayendo hacia el amor.

Debo cantar las ansias de amor, que hoy querida amiga.

Siento por ti.

No importa la gloria, porque mi voz te adora y; pregona mi amor por ti.

Escribo, donde mi tristeza se torna en poesía y; mis palabras.

Estallan llenas de flores, para ti.

Me sumerjo con las venas abiertas, hacia ti y tú amor por mí.

Por Ángel Fernández.

Caminando solo.

Camino solo, como ave solitaria en el infinito cielo.

Así vago solitario y sin rumbo, el camino de la vida.

Camino como fiera herida de muerte, que busca un no sé qué.

En los últimos momentos, de su desesperada agonía.

¿Dónde está la vida? Nadie responde ¿Dónde está la muerte? Nadie responde.

Sigo caminando, sin saber donde ni cuando llegare.

Pero tengo que encontrar una meta.

Ignoro donde estará mi destino en ese camino.

Aunque sé que esa ilusión, la tengo que alcanzar.

Por Ángel Fernández.

El rio y Yo.

Me siento como un rio cristalino, en las verdes mañanas.

Me siento bondadoso, quisiera deslizarme por tu cuerpo.

Cuerpo hermoso y lleno de esplendor.

Que explores mis afluentes y, darte de beber cientos de veces.

Sí, el día llegará, cuando veras mi lago oscuro y las nubes grises.

Yo veré, únicamente tú amor, que disolveré en mis aguas.

Formare un canto más, dedicando un poema de amor para ti.

Por Ángel Fernandez